Visibles únicamente desde latitudes meridionales, se alzan en el cielo nocturno dos pequeñas urbes estelares, conocidas como las Nubes de Magallanes. Aunque estas dos galaxias toman el nombre del explorador portugués Fernando de Magallanes, que las vio en su intento de viajar alrededor del mundo en una expedición épica (duró 3 años, de 1519 a 1522, y él no sobrevivió al viaje; sí lo hizo su segundo, Juan Sebastián Elcano y otros 15 miembros más de la expedición), fueron observadas ya en la Edad Media por el astrónomo persa Abd Al-Rahman Al Sufi, que las mencionó en su Libro de las Estrellas Fijas (nombra a la Gran Nube de Magallanes como Al Bakr, Buey Blanco), en torno al año 964.
A la izquierda, la Pequeña Nube de Magallanes (SMC), a la derecha, la Gran Nube de Magallanes (LMC)
La Gran Nube de Magallanes (LMC) se encuentra entre las constelaciones de Dorado y Mensa (La Mesa), a unos 157 000 años-luz de distancia de nosotros. Se estima que contiene unos 10 000 millones de estrellas, y tiene un diámetro de unos 35 000 años-luz. Esta galaxia es rica en gigantescas nubes de gas y polvo, lo que hace que sea una región muy activa de creación de estrellas.
La Pequeña Nube de Magallanes (SMC) se ubica en la constelación de Tucana (El Tucán), aproximadamente a 200 000 años luz de nuestra galaxia. Se le estiman entre 1000 y 4000 millones de estrellas, con un diámetro de unos 7000 años-luz. Aunque tiene una forma irregular, se cree que originalmente era una galaxia espiral barrada, pero su forma fue distorsionada debido a la intensa gravedad de nuestra galaxia.
Hasta hace bien poco, se pensaba que estas dos galaxias son satélites de nuestra propia galaxia, la Vía Láctea; sin embargo, estudios recientes inducen a creer que tan sólo están de paso. La medición de sus velocidades arrojan un resultado sorprendente. LMC se mueve a 378 Km/s, y SMC a 302 Km/s. Esto implica que o bien nuestra galaxia es mucho más masiva de lo que se cree (el doble, por lo menos), o que estas galaxias no son satélites de la Vía Láctea. Esta es la conclusión a la que han llegado los astrónomos Niya Kallivayalil, Charles Alcock y Roeland van der Marel. Presumiblemente, futuras mediciones darán más luz sobre esta teoría.
La Gran Nube de Magallanes, fotografiada desde el ESO
Veamos ahora un vídeo de la Gran Nube de Magallanes creado a partir de imágenes tomadas por el telescopio espacial Spitzer, especializado en tomar imágenes en la banda infrarroja.
El siguiente vídeo nos acerca a la nebulosa NGC 346, en la Pequeña Nube de Magallanes.