En las noches oscuras, se puede apreciar tras el ocaso durante la primavera y poco antes del amanecer en otoño una luminosidad con forma vagamente triangular en el mismo plano de la eclíptica, en la zona donde se encuentran las constelaciones del Zodiaco y los planetas. También se le conoce con el nombre de falso amanecer.
Esta banda débil de luz se produce por la difracción de la luz solar al incidir en pequeñísimas partículas de polvo que orbitan al Sol y forman un disco de unos 600 millones de km (prácticamente llega a la órbita de Júpiter). Las diminutas partículas de polvo que forman este disco tienen un tamaño comprendido entre los 10 y 300 micrómetros (10-6m) y una masa que está en torno a los 150 microgramos. El origen de estas partículas está en los cometas que atraviesan el Sistema Solar interior, dejando un rastro a su paso a lo largo de los años. El viento solar las ha ido dispersando, con lo que se encuentran separadas varios kilómetros unas de otras.
Esta banda débil de luz se produce por la difracción de la luz solar al incidir en pequeñísimas partículas de polvo que orbitan al Sol y forman un disco de unos 600 millones de km (prácticamente llega a la órbita de Júpiter). Las diminutas partículas de polvo que forman este disco tienen un tamaño comprendido entre los 10 y 300 micrómetros (10-6m) y una masa que está en torno a los 150 microgramos. El origen de estas partículas está en los cometas que atraviesan el Sistema Solar interior, dejando un rastro a su paso a lo largo de los años. El viento solar las ha ido dispersando, con lo que se encuentran separadas varios kilómetros unas de otras.
Luz Zodiacal, Vía Láctea y el Grantecan en el Observatorio del Roque de los Muchachos. Espectacular imagen obra de Daniel López (El Cielo de Canarias)